Just give me a reason {Joey & Lautner}

Un paso a la vez, era lo que me repetía una y otra vez, tenía que ser paciente esperar que las cosas sucedieran como debían de pasar, no acelerar las cosas, no adelantar nada, solo debía ser yo misma y tomar las cosas con calma ¿por qué tan ansiosa? No tenía ni la más mínima del porqué, solo me sentía muy ansiosa y quería que todo esto terminase de una vez, que simplemente acabaran todas estas sensaciones que crecían en mí, muchas emociones juntas solían ser dañinas la verdad que muy dañinas ya que podía lastimar sin querer hacerlo y eso verdaderamente no era agradable. Tantas cosas tenía en la cabeza que ni me percate que ya estaba frente a Starbucks, hoy era la hora de la verdad, hoy vería a Taylor Lautner una vez más antes de la pelea terrible que tuvimos hace unos días; para ser sincera exactamente no sabía que sentía hacía él, al comienzo lo sabía muy bien, me sentía muy atraída a él, pero de a pocos me di cuenta que mis celos crecían y no entendía el porqué de aquellos ridículos celos ¿qué diablos estaba pasando conmigo? En fin eso ya había pasado a otro plano cuando me reencontré con Joe, sentimientos hacía él empezaron a existir cuando termine con su hermano Nicholas, por supuesto espere que con el tiempo se marcharan, pero no fue así y ese día es cuando me di cuenta de lo muy equivocada estaba de ello.
Sin más pretextos entre al establecimiento y me senté en la mesa más cercana, esperando que alguna mesera me pudiese atender, ya que para ser sincera, ni hambre, ni sed tenía, solo quería terminar con todo de una vez por todas.

No podía creer sus palabras, era tan… ¡HOMBRE! Porque otra palabra no existía para describir su actitud de macho alfa, supuestamente habíamos quedado sin remordimiento pero a quien engaño los sentimientos estaban ahí, gritándome muy alto que todo esto estaba mal desde un comienzo, en su momento debí negarme y salir de ahí, pero no lo hice me deje llevar por su encanto y su patética actitud de ‘tengo en mi poder’ maldita la hora en que caí en sus encantos, moví la cabeza ligeramente y enarque una ceja mirándolo seriamente, muy pocas veces me comportaba así, pero para todo hay una primera vez. – No puedo evitarlo – le dije sincera, era verdad no podía evitar sentirme molesta, por más que quería ignorar ese sentimiento. – Sabes que en esa oración no van bien las palabras, hazme un favor y escucha lo que dices. Ponte un segundo en mí lugar y entenderás lo que siento – le dije en un tono agridulce. Al notar la presencia de la mesera tranquilice un poco mis gestos y respira profundamente intentando no salir del lugar como una cobarde. Cuando él pidió por mí me dio más coraje ¿por qué? Por el simple hecho que no quería absolutamente nada de él, pero no podía ser tan grosero y rechazarlo, aunque podía tirárselo encima, sería muy bueno para desfogar mi rabia. – Deja de pedirme que me calme que esto será peor y eso será con él tiempo y empezando que desde un comienzo no fuimos algo así como ¿amigos? – alce una ceja frunciendo el ceño y mirándolo mal. En el fondo solo quería arreglar las cosas, pero mi orgullo no me lo permitía, aunque él ya no valía la pena, estaba comenzando algo con Joe y no lo arruinaría solo porque Taylor me ponía de muy mal humor.